miércoles, 17 de junio de 2015

Osmany Juantorena: Sí jugaría por Italia



Por: Andy Bermellón Campos
(Tomado de Deporcuba)

 
El voleibol cubano transita por el capítulo más triste de su historia. Sin embargo, la afición no pierde la esperanza de poder aplaudir y alentar, algún día, a los mejores exponentes de la malla alta de nuestro país en el Coliseo de la Ciudad Deportiva.
Mucho tiempo ha pasado, una década exactamente, desde aquella actuación memorable que llevó a la selección masculina dirigida por Roberto García- actual seleccionador del equipo femenino- a ganar el metal broceado en la Liga Mundial de 2005. Despertaba una nueva generación, y parecía capaz de emular las actuaciones de Cuba durante la última década del siglo XX.

Osmany Juantorena fue uno de los baluartes en aquella contienda. Y es que el santiaguero puso sobre la mesa que llegaba al panorama voleibolístico con intenciones de convertirse en unos de los mejores jugadores del planeta. Pero su momento fue tan fugaz como una estrella y el excelente auxiliar se despidió rápido de la chamarreta de las cuatro letras.
Un par de años después, Juantorena reapareció aunque lejos de su natal Santiago de Cuba. Trabajó por sus metas y en poco tiempo acarició sus sueños al convertirse en una de las figuras claves dentro del prestigioso campeonato doméstico italiano.
El tiempo ha pasado y Osmany ha vuelto al  Coliseo de la Ciudad Deportiva. En calidad de espectador, observaba la presentación de Cuba ante su similar de Argentina como parte de la Liga Mundial. Al término del encuentro, y mientras saludaba a conocidos y seguidores, accedió a conversar con Deporcuba:
Situación actual de  Osmany Juantorena
Como se conoce, me encuentro jugando fuera de Cuba, hace exactamente siete años que juego en Europa. Acá estoy de visita, como cualquier cubano que se reúne  con la familia.
En el año 2006 sales inesperadamente del equipo nacional, se te vinculaba con una situación de dopaje detectada durante los Juegos Centroamericanos de Cartagena, Colombia. ¿Qué sucedió?
Fui sancionado por dopaje detectado durante los Juegos Centroamericanos en Colombia. La situación fue confusa porque me hicieron otras pruebas y resultaba negativo, aun así la Federación Internacional determinó que había incumplido.
Yo daba mi vida por el voleibol y aquí (Federación Nacional Cubana) dijeron que tenía que cumplir la sanción de dos años que se me había sido impuesta por la Federación Internacional. Yo alegué que no podía esperar todo ese tiempo sin jugar porque era muy difícil recuperar esos años y que al final me iba a pasar factura en mi progresión como atleta. No hubo solución y entonces decidí marcharme y probarme fuera, una experiencia que hasta ahora ha ido perfecta.

Una experiencia que demanda mayor rigor y profesionalidad. En los últimos años hemos visto una notable inserción de jugadores cubanos en diferentes ligas extranjeras ¿Cómo valoras el papel de tus coterráneos?
La mayoría de los que se encuentran jugando en ligas extrajeras lo están haciendo bastante bien y de una forma u otra representan a Cuba y ponen de manifiesto la calidad indiscutible de la Escuela Cubana de Voleibol. La mejor del mundo, a mi entender y el de muchos. Puedes preguntar a cualquier persona dentro y fuera de Cuba y te van a significar la calidad de nuestros jugadores. Mira el caso de León, uno de los últimos que ha salido y en su primer año ya es campeón de la Liga de Campeones con el Zenit de Kazán y está considerado entre los mejores jugadores de Europa.
Italia ha sido tu casa ¿Cuánto significa la Liga italiana para ti? ¿Nos ofreces tu valoración del torneo?
Llevo alrededor de seis años jugando en la Liga Italiana, es donde más tiempo he estado y ahora regreso otra vez. Para mí es la mejor liga hasta ahora, técnicamente hablando, porque físicamente está la rusa, pero pienso que la técnica influye más que la parte física en la valoración de un jugador. Es un liga que lleva muchos años en la elite del voleibol y creo que su calidad está probada a nivel internacional. Yo pienso que la mayoría de los jugadores sueñan con transitar por ella, de probarse en un club y de ganar un título de relevancia internacional. Creo que es una gran oportunidad que he tenido, y hasta ahora me he sentido muy bien allí.
La final de la Liga Italiana del año 2013 tuvo una historia muy singular para Osmany Juantorena. Se hablaba de “Salsa cubana” ya que cada equipo, el Trentino Volley y el Volley Piacenza tenían como principal figura a un cubano. ¿Cómo recuerdas ese momento y cómo lo asumiste?
Para mí fue un momento muy hermoso. Jugar contra Roberlandy Simón, era como un sueño. A Simón los estimo mucho, casi como si fuera un hermano, por los años que compartimos en la selección nacional. Uno de los dos tenía que ganar y la serie se definió en el último partido y en el tie break. Todo propició que esta historia se haya convertido en un momento inolvidable en la carrera de los dos. Un momento muy tenso. Al final me sentí muy contento por haber ganado, pero igual lo hubiera estado porque que en cualquier caso un cubano iba ser campeón de la Liga Italiana.
El voleibol cubano pasa por una situación compleja ¿qué piensas al respecto?
Yo no he seguido mucho de los partidos, ayer vi el primer juego por la televisión y entonces me decidí a venir a la Ciudad Deportiva  para ver este segundo partido contra Argentina, que desafortunadamente se perdió. En mi opinión lo que está sucediendo no va a cambiar para nada la situación que hoy transita Cuba en el voleibol. Pienso que la Federación Cubana y el INDER deben darse cuenta que el voleibol cubano puede crecer muchísimo a nivel de selecciones nacionales y recuperar el terreno perdido. Hoy  hay muchos jugadores cubanos que están triunfando en diferentes ligas y los resultados muestran la potencia que tiene Cuba en este deporte pero hay cosas que cambiar y nadie parece decidido a dar el paso.
Es una situación muy natural en cualquier país del mundo, los atletas juegan por los clubes casi todo el año y luego son llamados por sus federaciones para formar parte de la selección nacional. No sé cuáles son las razones que tienen acá para no permitirlo o si la Federación Internacional puede influir en que se arregle el problema. Son respuestas que todos buscamos porque en ellas está la solución para que hoy no tengamos que estar en la Liga Mundial con un equipo donde hay  jóvenes de 15 años , jugando un nivel que aun no le corresponde.
No puedes pedirle a un jugador inexperto, que se pasa todo el año entrenando en Cuba y jugando a nivel nacional, que tenga un desempeño sobresaliente cuando se enfrenta a equipos de talla mundial.
Yo pienso que el voleibol necesita un cambio, y a estas alturas tiene que ser rápido para terminar de darle esa satisfacción a un país y a una afición que ama el voleibol. Hay que apurarse porque queda muy poco tiempo antes que el voleibol cubano desaparezca del panorama internacional..

El 2005 fue un año muy importante para Cuba en la Liga Mundial. Eras parte de ese equipo y terminaste como el mejor receptor del torneo ¿Qué recuerdas de la final de Belgrado?
Para todos los que integramos ese equipo fue como un oro. Llegamos contra todo pronóstico a la final, donde recuerdo los partidos inolvidables ante Italia, Bulgaria y Francia acá en el Coliseo. Lamentablemente nos tocó tropezar con Brasil que -en aquel entonces- era un equipo prácticamente invencible y nos obligó a disputar la medalla de bronce contra Polonia. Pienso que ese momento nos consolidó a todos nosotros como jugadores. Fue el inicio de un camino que me ha traído hasta aquí, teniendo otras experiencias con la selección nacional y también en esta etapa a nivel de clubes.
¿Jugarías por Cuba?
Sinceramente no. Primero porque ha pasado mucho tiempo y ya no tengo la edad suficiente para jugar por Cuba. Segundo porque manifesté por medio de una carta a la Federación mi disposición de jugar y aunque la respuesta fue positiva, tenía la condición de dejar Italia. Una exigencia que no pude aceptar porque no podía abandonar mi carrera y todo lo que había logrado hasta ese momento, para estar todo un año prácticamente inactivo y representar a Cuba.

¿Italia es una opción?
Podría ser. En estos momentos es la única oportunidad que tengo para jugar unos Juegos Olímpicos ya que como expliqué, por Cuba no va a ser posible. Es el sueño de todos los deportistas a nivel mundial  participar en una Olimpiada. Si la única oportunidad que tengo de jugarla es por Italia, yo juego por Italia. Soy cubano, represento a Cuba, pero esta es mi carrera. Los años no perdonan y no te puedes sentar a esperar. Ya tengo 30, es Río o nada, porque si no pasa ahora, no sucederá, A los 34 años ya pienso haber terminado mi carrera deportiva.


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